Un aspecto muy importante en el laboratorio de reproducción humana asistida es saber valorar la calidad embrionaria para poder seleccionar aquellos embriones que tienen más posibilidades de dar embarazo.
Hasta hace unos años esta clasificación se realizaba únicamente en función de la morfología del embrión. Básicamente, se valoraban el número de células, la simetría de las mismas y el porcentaje de células que se habían fragmentado. En función de estos parámetros clasificábamos el embrión con un sistema de letras A, B, C y D donde A eran los embriones de mejor calidad y D los de peor calidad.
Con la introducción hace unos pocos años de los incubadores con sistema time-lapse , a esta valoración morfológica le añadimos una valoración cinética, creando así una clasificación morfocinética. De esta forma, además de observar los parámetros morfológicos antes explicados, observamos también el ritmo de división celular. Con este nuevo sistema de clasificación mejoramos la forma de seleccionar los embriones a transferir.
Recientemente, hemos introducido una técnica (EMBRACE) que nos permite conocer la calidad genética del embrión. Con esta técnica podemos seleccionar los embriones además de por su morfocinética por su calidad genética.
Con todas estas herramientas hemos ido mejorando la manera de seleccionar los mejores embriones para transferir obteniendo mayores tasas de embarazo con el menor número de transferencias embrionarias.
Daniel García
Embriólogo
Imagen: Calidad embrionaria para transferencia o congelación de embriones (reproduccionasistida.org)